SAINT GERMAIN Y LA ESPIRITUALIDAD:
Cómo utilizar la fuerza del YO SOY para crecer mental y espiritualmente, solucionar problemas y cosechar tesoros para el más allá, con la fuerza del YO SOY LA ENERGÍA DEL CREADOR EN ACCIÓN.
SAINT GERMAIN – METAFÍSICA PARA LA VIDA DIARIA
PRÓLOGO
Tiene una doble importancia para nosotros, puesto que además de estar llena de claves y consejos para todos los días, constituye una de las pocas disciplinas dedicadas a la espiritualidad.
EL VIVIR DE CADA DÍA
“YO SOY” la Presencia de Dios que mantiene el Fuego Violeta ardiendo en todo mi ser y en todo mi mundo y mi amada presencia transmuta toda imperfección que yo pueda haber creado y me repone toda la fuerza y perfección que yo deseo.
“YO SOY” el ser ascendido que estoy deseando ser y ordeno a mi amada presencia que gobierne perfectamente mi mente, mi hogar, mis asuntos y mi mundo.
“YO SOY” la resurrección y la vida de toda perfección en mi vida:
- De mi eterna juventud y belleza.
- De mi agilidad y frescura.
- De mi perfecta visión y oído.
- De mi perfecta salud.
- De mi fuerza y energía ilimitadas.
- De mi dentadura perfecta, de mi piel y de mi estructura ósea.
- De mi perfecta simetría.
- De mi fondo ilimitado de dinero.
- De todo lo perfecto en mi mundo y en mi vida.
- De todas las facultades de mi cuerpo.
- De mi plan divino cumplido ya.
Yo pido ser protegido contra todas las intromisiones que por necesidad atravieso y todo lo que se me acerca es transmutado en mi aura, porque yo no estoy aquí para cumplir un lapso kármico sino para irradiar energía permaneciendo intocado por cualquier vibración menor.
“YO SOY” manso y humilde de corazón.
“YO SOY” el Amor y Poder Divino.
“YO SOY” la riqueza, la elegancia, la alegría y la felicidad.
“YO SOY” el cuerpo de Cristo y todas las nobles facultades, talentos y virtudes.
“YO SOY” el camino, la verdad, la vida y la puerta abierta que nadie puede cerrar.
“YO SOY” uno con el Padre y la presencia guardiana que nadie puede afectar, asustar ni desagradar.
“YO SOY” DIOS EN ACCIÓN Y TODO ESTO PIDO PARA TODOS MIS HERMANOS.
¡Gracias, Padre, que me has escuchado!
TE REGALO TODO LO QUE SE TE ANTOJE
1.- Escribe en un papel todas las cosas que tú deseas, sin temor a pedir demasiado, pues la fuerza que te voy a dar no sabe de limitaciones.
2.- Lee la lista al despertarte y antes de dormir.
3.- Piensa a menudo en tus deseos. Goza imaginándolos y siempre que los recuerdes di: ¡Gracias, Padre, por haber dado la orden de que me sean concedidos!
4.- No cuentes a nadie lo que estás haciendo, porque si lo comentas se disipa toda la fuerza y no verás realizados tus deseos.
Sé espléndido contigo mismo y no digas en tu lista que deseas “una casita aunque sea pequeña”, pídela del tamaño que te convenga. Si es dinero, menciona la suma, si es trabajo indica de qué clase, el sueldo al que aspiras, las condiciones y la localidad más convenientes para ti.
En tu primera lista pon cosas sencillas para que te vayas acostumbrando a ver maravillas, porque como no estás acostumbrado, no vas a creer que sea posible, y te advierto que esta duda te puede costar el que no veas lo que has pedido.
El dar gracias por lo que aún no has visto es la forma más positiva de manifestar la fe, como lo hizo Jesús antes de alimentar a cinco mil personas con cinco panes y cinco peces cuando miró al cielo y dio las gracias en el momento de partir la primera hogaza de pan.
Cada vez que leas tu lista vas a tener que tachar algunos puntos porque muchos de estos deseos ya se han realizado. Tu Yo Superior te irá indicando que muchos de estos deseos están ya al alcance de tu mano, mientras que otros no lo están tanto.
Nunca te pongos a elucubrar respecto a la manera como se van a dar ya que es contraproducente, ni pienses o digas ¡Esto no parece posible!…
LOS QUINCE PUNTOS PARA SABER SI ESTOY REALMENTE EN EL SENDERO
1.- Si siempre busco el bien en cada situación, persona o cosa.
2.- Si realmente doy la espalda al pasado, sea bueno o malo, y vivo únicamente el presente.
3.- Si perdono a todo el mundo sin excepción y luego me perdono a mí mismo de corazón.
4.- Si considero mi tarea diaria como sagrada tratando de cumplirlo lo mejor posible.
5.- Si hago todo lo que puedo en mantener mi cuerpo sano y un ambiente armonioso,
6.- Si trato de prestar servicio a los demás sin fastidiarles.
7.- Si aprovecho todas las ocasiones para enseñar la verdad de forma sabia y discreta.
8.- Si evito la crítica, negándome a escucharla o apoyarla.
9.- Si dedico al menos media hora a la meditación o a la oración.
10.- Si leo 7 versículos de la Biblia o algún capítulo de algún libro instructivo para esta era.
11.- Si cada día pido o demuestro comprensión a otros, sabiendo que Dios está conmigo.
12.- Si me entreno para dar mi primer pensamiento a Dios al despertar.
13.- SI cada día pido por el mundo entero o hago algún otro ejercicio altruista por los demás.
14.- Si practico la regla de oro de Jesús: “Haz a otros lo que desees que te hagan a ti”.
15.- Si hago por trasformar con la programación todo lo que yo veo que es un espejismo o error.
Pregúntate cada semana si estás cumpliendo todos estos puntos, que son tan importantes y no olvides de añadir la oración de la llama violeta: ”YO soy la Ley del Perdón y la llama transmutadora de todos los errores cometidos por mí y por toda la humanidad”.
SALÓN METAFÍSICO DE BELLEZA
Cuando se entra en Metafísica; es decir, cuando se está dispuesto a cambiar la conciencia carnal por la conciencia espiritual, se aleja de las leyes terrenales y se entra en el plano espiritual y la manifestación suave y perfecta.
Para quitarse manchas e imperfecciones el Ascendido y Maestro Espiritual San Germain ha trazado una serie procedimientos para ejecutar todos los días sin esfuerzo, ya que todo se desprende de la creencia en el poder de los efectos exteriores que están arraigados en el subconsciente.
Los efectos exteriores son, que la gordura es efecto de lo que uno come y que lo que entra por la boca puede convertirse en efectos de la fealdad. El Maestro Jesús dijo “no es lo que entra por la boca lo que daña al hombre, sino lo que de la boca sale, porque del corazón procede”; o sea que la palabra es un decreto de lo que en ese entonces llamaban “el corazón”, que es el subconsciente.
Nuestro Amado Maestro San Germain ha dictado los siguientes ejercicios para adelgazar:
- Todos los días ante el espejo, con la mano izquierda levantada y la palma hacia el cielo y con la derecha sobando el vientre en rotación de izquierda a derecha di: Yo soy la magna energía electrónica que entra, fluye y renueva cada célula de mi cuerpo y mi mente, eliminando todo lo que no sea similar a ella ahora mismo.
- Visualiza un círculo de luz plateada que sube y baja entorno al cuerpo, soba circularmente todas las partes de tu cuerpo que quieras adelgazar y di: YO SOY LA MAGNA ENERGÍA QUE ENTRA, FLUYE, RENUEVA, EMBELLECE Y REJUVENECE.
DECÁLOGO
1.-…Seré feliz, expulsaré de mi espíritu todo pensamiento triste. No me lamentaré de nada y agradeceré a Dios la felicidad que me regala.
2.-…Trataré de ajustarme a la vida. Aceptaré el mundo como es y si sucede algo que me desagrada no me lamentaré y agradeceré que haya sucedido y que puso a prueba mi voluntad de ser feliz. Y seré dueño de mis nervios, de mis sentimientos y de mis impulsos, indispensable para triunfar.
3.-…Trabajaré con energía, ánimo y pasión, haciendo de mi trabajo una diversión y no pensaré en los fracasos.
4.-…No criticaré a nadie y si lo estoy haciendo, cambiaré mi crítica por elogios.
5.-…Voy a eliminar dos plagas: la prisa y la indecisión y tendré confianza en mi mismo y haré frente a los problemas con decisión y voluntad.
6.-…No tendré miedo y actuaré con valentía. Dios ayuda a los que luchan y trabajan.
7.-…No envidiaré a los que tienen más dinero, más belleza o más salud y compararé mi vida con la de los que sufren más.
8.-…Trataré de resolver los problemas de hoy. Si algo me queda por hacer, lo haré mañana.
9.-…No pensaré en el pasado ni guardaré rencor a nadie. Asumiré sin echar la culpa a nadie y comprobaré que Dios me ama y me premia con amor.
10.-…Haré a alguien una buena acción y comprobaré que Dios me ha premiado con un día lleno de felicidad y de mañana haré un día como el de hoy.
¿QUÉ SIENTES?
Solo hay dos sentimientos que pueda sentir un ser humano: amor y temor.
¿Qué es la ira? Un temor disfrazado. En química encontramos una sustancia se presenta bajo apariencia totalmente diferente; por ejemplo, el carbón negro es la misma cosa, químicamente, que el diamante, aunque parezcan distintos; se dice que ambos son formas alotrópicas del carbón.
De la misma manera, la ira, el odio, los celos, la crítica, el egoísmo no son sino formas alotrópicas del temor.
El gozo, el interés, la satisfacción del éxito, la apreciación del arte, son formas alotrópicas del amor.
La gran diferencia que hay entre ambos sentimientos es que el amor siempre es creador y el temor, destructivo. Un sentimiento de amor reconstruye el cuerpo, alarga la vida, da inspiración, expansión de los negocios, abre los caminos en un centenar de direcciones y domina los obstáculos.
El temor destruye el cuerpo, mata la inspiración, paraliza los negocios y cubre todo de un velo de muerte.
Nos toca decir cuál de estos sentimientos ha de regir nuestras vidas. Piensa que Dios es amor y el que habita en el amor, habita en Dios y Dios en él.
LA REALIZACIÓN
Hay una gran diferencia entre lo que crees y lo que crees que debes creer. Tú manifiestas en tu vida aquello que realmente crees y si algún día llegas a creer otra cosa, ese día comienzas a manifestarlo y a experimentarlo, no antes.
No basta con decir que sabes que tal o cual cosa no puede lastimarte, si solo tienes una idea, pero si tú sientes, aunque solo sea levemente, que no pueden hacerte daño, la cosa es distinta. Esto es lo que llamamos realización; saberlo y sentirlo, es decir, tener convicción.
No basta con decir que todo va a estar bien, a menos que creas lo que estás diciendo. No basta con decir superficialmente que Dios está contigo, a no ser que lo creas y lo sientas, aunque solo sea en grado leve.
El único objeto de hacer tratamientos espirituales es aumentar tu propia realización de la verdad, que ya has aceptado; o sea, que el error y el temor no tienen poder sobre ti cuando tú no cedes a ellos.
ESTOY EN EL SENDERO DE LA VERDAD
SI CUMPLO RELIGIOSAMENTE LOS SIGUIENTES QUINCE PUNTOS
1.- Si siempre busco lo bueno de toda persona, situación o cosa.
2.– Si realmente doy la espalda al pasado, bueno o malo. Si se piensa en el pasado, con la mente se le hace regresar y puede volver a suceder.
3.– Si perdono a todo el mundo sin excepción y me perdono de todo corazón. No se puede perdonar la misma cosa dos veces, basta una y ya queda borrada.
4.– Si veo mi obligación de cada día y la veo como cosa sagrada y la cumplo, guste o no.
5.– SI tomo las medidas para tener un cuerpo sano y para formar un ambiente armonioso a mi alrededor, sin tener prejuicios para nada.
6.– SI trato de servir a otros moderadamente, sin interferir en su libertad, su libre albedrío y sin causar molestias.
7.– Si aprovecho todas las oportunidades para enseñar la verdad sabiamente sin forzar la voluntad del discípulo.